Un total de seis lo fueron de Mayencos, nutrida representación. El río, en aparente buen estado de caudal pero ya se sabe: si el caudal es bueno y cómodo para el pescador, lo es malo y corto para la pesca. Y así fue. Quitando algún tramo que no defraudó y dio peces en casi todas las mangas, otros no fueron tan generosos, incluso puede decirse que fueron jueces de la competición.

Dos tramos en particular se llevaron la palma: el 1 y el 5. UFFFFF que matadero.

Pero no es excusa. En cuanto a la competición, pues un grandísimo (por su tamaño y por su valía) David Margalejo, dominó la competición de principio a fin, seguido muy de cerca por otro grande que este año 2019 está que se sale (aunque siempre esta allí) Eduardo Redol y en tercera posición un muy regular Alberto Llanas (que lo bordó en el tramo 1 con tres peces y un primer puesto de tramo).

Muy irregulares los periodos de pesca en cuanto a actividad pues en algunos casos, en media hora se hacía toda la faena, e incluso en menos tiempo. Pero, eso es la pesca.

No nos coge de nuevos y ya todos sabemos que cuando se depende en gran parte por las condiciones meteorológicas reinantes, calores, lluvias, bochorno... pero cada vez más, se intenta llegar a que las clasificaciones sean lo más justas posibles. Y eso busca la ORGANIZACION (y lo pongo con mayúsculas pues creo que merecen ese reconocimiento) con el nuevo formato de clasificación. Luego está la controvertida medida del tramo pescado o tramo sin pescar. Defensores tiene así como detractores, pero es una medida Federativa adoptada para sus tres provincias y es lo que hay. Habrá que ir acostumbrándose a ello (en los campeonatos nacionales ya se hace así desde hace tiempo) e ir aceptándolo como habitual.

Y en cuanto a Mayencos, ¡¡¡¡¡TODOS DESCENDIDOS!!!!! Mejor posición para Miguel Sádaba con un decimo puesto seguido de David Capablo en el decimoprimero.

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